
Fuente
Me he dado cuenta de que algunos de mis lunes son muy diferentes al resto de mis días, y esto se debe a que hago muy pocas cosas, lo que me hace mucho bien, tanto en lo físico como en lo mental. Por diferentes factores mis días pueden ser medio caóticos, pero mis lunes, al vivirlos en otra ciudad, y tener, tanto obligaciones como distracciones más limitadas, suelen ser más tranquilos que el resto de mis días.
De esto me di cuenta por casualidad, pero desde que lo hice, cada vez más vivo mis lunes de manera consciente, a una velocidad diferente al resto de mis días, y es algo que verdaderamente disfruto, además de que me hacen mucho bien. Los lunes son mis días de 'slow life'.
En un mundo en que el tiempo es dinero, y la productividad es prácticamente nuestra unidad de medida, hacer poco es casi contra intuitivo, un acto de rebeldía, y un lujo que no siempre nos podemos dar. Si lo piensan un poco, eso es terrible, pero también real.

Fuente
Hoy, por ejemplo, mi día ha sido de lo más simple, lo inicié viajando muy temprano por la mañana a la ciudad de Valladolid, donde me encuentro en este momento, y que se ubica a poco más de horas de Mérida, mi ciudad de residencia. Este viaje lo hago en autobús, y lo aprovecho para leer, meditar, y en general para relajarme y descansar.
Llego a Valladolid y tomo un taxi directo a la universidad, y al llegar me preparo un café y entro directo a impartir mis dos clases del día. El estar en otra ciudad, el reencuentro con alumnos y colegas maestros hace que sea siempre un día muy agradable. Aquí es donde compruebo que cambiar de contexto, tiene su peso.
Terminando mis clases me voy a la sala de maestros a hacer trabajo administrativo, atender a algunos alumnos, y pendientes propios de mis clases. Cuando todos se van, yo me quedo y almuerzo en la oficina mientras termino mis horas administrativas, y luego me retiro en taxi al lugar donde me hospedo, una casa en el centro de la ciudad donde me rentan una habitación, y desde donde tengo todo cerca, y a pie.

Fuente
Cuando tengo tiempo y estoy de humor, aprovecho las tardes para salir a caminar por la ciudad, o las noches para salir a cenar a algún lugar accesible, ya que al ser un sitio turístico, a veces puede ser algo caro, porque sus precios están pensados para extranjeros.
Sin embargo cada vez es más común que me limite a checar tener todo listo para mis clases del martes, me quede leyendo algún libro, viendo el episodio de alguna serie, o simplemente me la pase durmiendo, un placer que cada vez valoro más. Hoy afortunadamente pude darme ese lujo, ya que anoche mis vecinos se la pasaron de fiesta hasta la madrugada y no me dejaron dormir.
Me ha pasado que me tomo una siesta por la tarde, y cuando despierto ya es de noche, así que no me queda otra que seguir durmiendo, y al día siguiente me siento hasta más ligero después de dormir tan bien, y el día se vive diferente, con más energía, con más alegría, y no en modo zombie, como cuando uno está todo el tiempo como loco y mal durmiendo.

Fuente
De repente estoy descubriendo que la clave no es hacer muchas cosas, sino hacer cada vez menos, pero estando inmerso en ellas, disfrutándolas, desde lo laboral hasta lo personal. Comer saboreando cada bocado es una verdadero placer, uno que todos tenemos a nuestro alcance y al que renunciamos con demasiada frecuencia, o lo que es peor, con demasiada facilidad.
Mientras más lo pienso, y lo experimento, más me convenzo de que la clave está en vivir más despacio, pero de manera más consciente, más presencial y menos en piloto automático. Cocinar y disfrutar el proceso, en vez de comprar comida. Limpiar la casa y encontrarle su lugar a cada cosa, en vez de pagarle a alguien para que lo haga. Y en general, aprender a disfrutar del día a día como parte de quienes somos y lo que somos.
Regar y cuidar mi jardín de repente ha pasado de ser una carga, algo que me quita tiempo, a ser algo que disfruto, y me relaja y me regala vida. Hacer las compras de la semana se está volviendo una caminata y búsqueda del menú de la semana, en vez de ser algo que tengo que hacer porque ya tengo la alacena vacía.

Fuente
Escribir esto, es otro ejemplo. En algún momento publicar de manera constante se vuelve una presión, pero desde que escribo cuando tengo tiempo, y si no lo tengo no me estreso por ello, y he dejado de preocuparme sobre que temas escribir, y escribo simplemente sobre lo que vaya surgiendo, la experiencia se ha vuelto mucho más relajante, y el producto final ha mejorado como una consecuencia natural.
Tal vez esto tiene que ver con la edad, y la rebeldía que da la experiencia, la verdad no lo sé, pero cada vez me resulta más evidente que mi vida es mejor si la vivo a una velocidad menor a la del mundo que me rodea, y batallo para poder hacerlo así, porque todo me empuja en la otra dirección.
Parecer apático, e incluso flojo o poco comprometido a los ojos de los demás, es parte de lo que esto implica. Visto desde afuera, el que hagamos menos de lo que podemos hacer, ser ve, no como una virtud, como una decisión consciente y respetable, sino como un desperdicio de talento y potencial. Y no siempre es bien visto, a pesar de que vivimos en la época del yoga, la meditación, el 'nowness', la 'slow food', y movimientos similares.

Fuente
Vivir rápido o lento son opciones que deberíamos poder elegir, en vez de experimentar sin que seamos conscientes de ello. Pero para eso es necesario hacer un alto y preguntarnos como queremos vivir, algo que poca gente hace. Para muchos la pregunta es un lujo, pero para otros es algo que parece incluso ocioso, porque han normalizado tanto la manera en la que viven que no imaginan otra opción.
Si ese es tu caso nunca es tarde para reflexionar sobre la vida que tenemos, y que tan conforme estamos con ella, y a partir de la respuesta, y nuestras posibilidades, tener más control sobre como es nuestra existencia. Encontrar lo que nos hace sentirnos mejor es importante, y no en todos los casos es vivir a un ritmo más lento, hay gente que prospera más en un entorno más 'movido', ya sea por su metabolismo y/o su personalidad.
Sea cual sea el caso creo que lo mejor es siempre vivir de manera intencionada, y no en piloto automático, pero es solo mi punto de vista. Como siempre muchas gracias por leerme, y hasta la próxima.
©bonzopoe, 2025.


Si llegaste hasta acá muchas gracias por leer este publicación y dedicarme un momento de tu tiempo. Hasta la próxima y recuerda que se vale dejar comentarios.

Fue como estar largo rato hablando con uno mis mejores amigos...
Gracias, @bonzopoe
Te envío muchas bendiciones y mis saludos, amigo.
Gracias por comentar amigo, siempre es un gusto verte por acá.
A pollinator from The Pollen Nation feels this post deserves extra attention!
We appreciate your contribution to the blockchain.
For more information or to reach out to us, join our Discord server!
Gracias por el apoyo. Saludos.
@tipu curate 8
Upvoted 👌 (Mana: 0/69) Liquid rewards.
Muchas gracias por el apoyo.