¡Buen día! Una vez más nos encontramos aprendiendo de la vida y sobre todo de nosotros mismos, a través de los ejercicios de autoconocimiento, que nos ofrece @damarysvibra. Me gusta realizarlos y me agrada mucho más el aprendizaje que obtengo cuando reviso, dentro de mí, diferentes aspectos que me conforman.

Creo que lo que más les gusta de mí a los demás es... Así reza el título de la publicación en la que @damarisvibra, nos invita a reflexionar, sobre aquellas cualidades, actitudes y aptitudes que podemos observar que les gustan a los demás sobre nosotros.

Vivir para agradar al otro, no es la premisa, o es lo que yo creo. Siento que vivir, para sentirme agradada, agradecida y feliz, es mi premisa, siempre y cuando actúe en armonía con el otro, sin pisotear, ni pasar por encima de los demás. Aun así, reconozco que hay actitudes en mi forma de ser, que los demás agradecen y que buscan en mí, cada vez que vienen a mi encuentro.

Una de esas actitudes que forma parte vital de mi comportamiento, es el buen humor. Soy una persona alegre, que ve en todas partes el lado chistoso de las cosas. Me fascina reír y, si es a carcajadas, mejor. Prefiero reír que llorar, y cuando me ocurren situaciones alocadas y desagradables, las termino convirtiendo en una experiencia que da risa. No sé, si es una estrategia para escapar del dolor, o de la frustración, pero me reconforta mucho reír, eso me hace sentir muy bien.

Entonces, las personas de mi entorno, tienden a conversar conmigo y a disfrutar de mis ocurrencias, o a disfrutar, también, de que yo me ría de sus ocurrencias. Mi hermano Leonardo, me dice casi siempre, que yo soy una de las que se ríe de todo lo que él dice, y eso le gusta. Pero es que él es muy ocurrente y no reírse de sus comentarios es misión imposible. Mi esposo también me dice con frecuencia, que le gusta mucho mi buen humor, y me encanta ver cómo se ríe y disfruta de mis ocurrencias. Yo misma me sorprendo con mi ingenio, pues se me ocurren cosas muy graciosas y las digo sin pensar, ni calcular, y resultan ser muy cómicas.

Mi hermano menor, también es así, y posee una agudeza mental a la hora de decir cosas chistosas, que muchas veces nos deja sin habla y casi sin poder respirar de tanto reírnos. Creo que de los cuatro hijos de mi mamá, mi hermano menor es el más alocado y ocurrente.

Me gusta ayudar. Me hace feliz saber, que puedo hacer cosas por los demás y que ellos sepan, que pueden contar conmigo. En cualquier caso, situación, o emergencia, la mayoría de las veces recurren a mí y me siento honrada de poder ayudar y de que me tengan en cuenta entre sus personas importantes para ubicar soluciones.

Vine al mundo con el don de la palabra y la buena comunicación. Me cuentan mis mayores, que desde pequeñita hablaba hasta por los codos. Ese aspecto de mi personalidad, me une a muchas personas que de alguna forma u otra me hacen saber que disfrutan de conversar conmigo y me buscan para eso, para tomarnos un café y elucubrar sobre cosas de la vida. Eso también lo disfruto mucho. No me cuesta entablar una conversación con nadie, ni siquiera con desconocidos, que luego terminan siendo conocidos de tanto conversar, ja, ja, ja, ja.

Me gusta mucho practicar la paz, la estabilidad emocional, el agradecimiento y por eso me mantengo informada sobre diferentes ideologías y filosofías, como la gratitud, el hohoponopono, la ley de la atracción, la ley de la asunción, el holismo, biodescodificación, etc. Y trato de aplicarlas en mi vida como forma de mantener mi equilibrio. Entonces mis amistades y familiares, me buscan para conversar al respecto y de esta forma vamos aprendiendo juntos a mantenernos en bienestar. Creo que mi forma de ser, en ese sentido, gusta mucho a quienes me rodean.